(Roskill) En lo que va corrido del 2019 los precios del cobalto han experimentado una caída dramática. El precio del metal llegó a su máximo en los últimos diez años en 2018, con un valor de US$40/lb en abril pasado, antes de comenzar a caer.

En efecto, el 2019 abrió con un valor de US$ 27/lb pero se ha mantenido a la baja. En Europa los precios bajaron de los US$20/lb hacia fines de enero y hoyse transa a valores cercanos a US$15/lb.

En el 2018 la alta demanda y una disponibilidad estrecha del metal se tradujo en que los productores elevaran fuertemente sus ingresos. Estos altos precios condujeron a una respuesta exagerada de los productores de la República Democrática del Congo (DRC por su sigla en inglés), incluyendo a los mineros artesanales.

Inevitablemente, el resultado fue un mercado con sobre stock y con grandes reservas de hidróxido.

El sobre stock de productos intermedios, a partir de esta realidad contribuyó a la caída de los precios en la segunda mitad del año pasado y en el primer cuarto del año en curso. Con un mercado para derivados químicos del cobalto suficientemente abastecido, los productores de refinado de China se aprovecharon de las condiciones del mercado y produjeron aún más cobalto metálico con el objeto de generar atractivos ingresos antes del término de 2018. Un mercado con sobre oferta de cobalto ayudó a deprimir el precio todavía más. Así, aun cuando el mercado muestra débiles señales de recuperación, domina un sentimiento depresivo; pero Roskill espera que ocurra una expansión significativa de la demanda, lo que se traducirá en un crecimiento de casi al doble del consumo actual en la próxima década.

Roskill publicará en junio próximo su reporte Expectativas para el Mercado del Cobalto. El informe contendrá proyecciones sobre oferta y demanda y precios para el cobalto así como también información histórica, incluyendo el detalle de cómo se ha comportado la producción de cobalto por producto, como así también una sección expandida sobre el rol que a futuro le corresponderá a la DRC en la cadena de suministro de cobalto.