En febrero pasado, Lundin Gold informó que su filial Aurelian Ecuador SA adjudicó al consorcio SME, compuesto por las empresas Mas Errázuriz y Semaica, el contrato de desarrollo minero del proyecto aurífero Fruta del Norte, el cual se ubica al sureste de Ecuador.

Según estimaciones de la compañía, el proyecto llegaría a producir 4,4 millones de onzas de oro y 5,2 millones de onzas de plata, a lo largo de una vida inicial de la mina de 13 años, utilizando una recuperación promedio de oro del 91,7% y un promedio de recuperación promedio de plata del 81,5%.

Para explicar su experiencia en la minería ecuatoriana, Javier Walger, gerente comercial corporativo de Mas Errázuriz, conversó con Latinominería respecto al potencial minero de Ecuador y la importancia de ser parte de dicho desarrollo, abordando aspectos como el desafío de contar con trabajadores capacitados para llevar a cabo las operaciones mineras.

¿Cómo surge la participación en este proyecto?

Tenemos en Chile más de 35 años de experiencia y estamos muy bien posicionados en Perú hace 20 años. También estamos en Argentina y creemos que nuestro know how es un gran aporte para el desarrollo en Ecuador y una importante herramienta para lograr un ingreso exitoso  en este mercado.

El ecuatoriano es un mercado en el que está todo por hacer. El país ha ido avanzando en sus políticas para ir abriéndose a la inversión en gran minería, tiene reservas muy interesantes de mineral, tanto cobre como oro; es un mercado donde que hay que estar.

Hay varios proyectos que, se vislumbran, podrían comenzar alrededor de 2020, pero que hoy están en etapa de sondaje. El proyecto Fruta del Norte, en el que estamos actualmente operando, es el primer gran proyecto de minería en Ecuador, así que, en parte, es una vitrina en la que se está en los ojos de un país volcado en (evaluar) cómo la compañía está gestionando el proyecto, cómo se relaciona con  las comunidades y el medio ambiente; hasta el mercado está atento a cómo se están desempeñando los contratistas.

Para nosotros es la mejor publicidad tener una buena gestión, un buen desempeño en Fruta del Norte, como puerta de ingreso al mercado ecuatoriano.

Hay un mercado ávido de tener proveedores en muchas áreas y la idea es que un gran porcentaje de ellos sean locales, pero para eso se requiere desarrollo y  tiempo, por lo tanto,  también traeremos  know how desde Chile. Para un proyecto de esta envergadura, hoy en día, Ecuador necesitan buscar afuera.

¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar en este proyecto, de trabajar en Ecuador?

Primero que nada reiterar que nos asociamos con una empresa local, Semaica,  y formamos un consorcio, SME, por las iniciales de las dos empresas. Esto nos da una fortaleza en cualquier mercado diferente del chileno, de poder enfrentar el primer desafío que es la cultura, para hacer negocios, contratar gente, para entenderse con los trabajadores ecuatorianos, en este caso.

Luego vino el desafío de buscar proveedores locales en un mercado que recién se está abriendo a la minería de gran escala. El apoyo del socio también es importante, por el conocimiento que tiene del mercado ecuatoriano, es una empresa que lleva más de 60 años en construcción en Ecuador.

Una fuerte y precisa planificación y control de la faena es lo que nos ha ayudado a minimizar estos impactos, para poder cumplir los compromisos que tenemos con Lundin Gold, que son los dueños de Fruta del Norte.

En la actualidad estamos desarrollando dos portales de acceso a la mina, cada uno lleva un túnel en suelo de 75 metros, y luego de eso se continúa con dos rampas descendentes que van paralelas y separadas entre sí por 25 metros. Son rampas con una sección importante, de 5 metros de ancho por 5,5 de alto y pendientes de 15%.

Tenemos que hacer, además,  conexiones cada cierta distancia entre ambas rampas, hay estaciones de bombeo, subestaciones eléctricas, refugios peatonales, etc.

Esto significará desarrollar, en una primera etapa, un poco más de ocho kilómetros de tunelería.

¿En qué etapa se encuentran las obras?

Estamos en el túnel interior. Hemos terminado la parte de obras tempranas y ya estamos enfrentando roca. Ya finalizamos la primera etapa donde sale puro suelo.

¿Cuáles son los tiempos de estas obras?

Este es un proyecto que tiene 36 meses. Lo comenzamos a principios de este año. Tenemos hasta 2020 en esta primera etapa y obviamente la apuesta es seguir acompañando a la minera por el resto de los desarrollos.

Proyecciones y potencial de crecimiento

¿Observan otros proyectos mineros de interés en Ecuador?

En la actualidad hay proyectos que están en etapa de sondaje, tanto de cobre como de oro, que en primera instancia serán de minería subterránea, sin embargo, sin embargo, como están en una etapa tan temprana de sondaje, están focalizados en definir la dimensión del mineral que tienen.

Una vez dimensionado el yacimiento y la posición exacta bajo la superficie, los expertos analizan si va a ser un proyecto viable a rajo abierto o a minería subterránea.

Sin embargo, hoy no hay mayor trabajo que Fruta del Norte.  Existen un par de otras mineras más pequeñas que están funcionando en Ecuador, pero la gran apuesta es que al 2020 ó 2021, ya estén definidos y comenzando a operar estos yacimientos.

¿Cómo visualiza el mercado minero ecuatoriano?

El desafío hoy en día para todos, partiendo por el propio Ecuador y los que estamos comenzando los trabajos allá, es que estamos en un mercado completamente virgen, en pañales.

Estamos juntos, Ecuador por su lado, normando las políticas, velando por su parte ambiental y comunitaria, garantizando y dando seguridad a las inversiones extranjeras para que sigan llegando nuevos actores, con dinero para explotar sus yacimientos.

Por el lado de los proveedores, desarrollar este mercado significa desarrollar a los proveedores locales. Se necesita gente que pueda alimentar a las personas que están en faena, transportarlas, hay todo un tema de los repuestos de los distintos equipos mineros que se ocupan.

Hay grandes posibilidades para infinidades de distintos rubros de proveedores de la minería, pero como mencioné la mano de obra tampoco es especializada. Llevamos gente nuestra con  años de experiencia y estamos capacitando a trabajadores locales. Tenemos un importante porcentaje de nuestra fuerza que hoy día es local, ecuatoriana, pero a esas personas hubo que capacitarlas, trabajo hay que seguir haciéndolo.

La minera también por su lado ha desarrollado distintos centros de formación técnica para ir capacitando a la mano de obra ecuatoriana en lo que significa trabajar en minería.