Vanessa Davidson, directora de Investigación y Estrategia del Cobre del CRU, organizadores de la Conferencia Mundial del Cobre, aportó su visión respecto del comportamiento actual y futuro de este mercado. Una mirada a la que más tarde se sumaron las de otros analistas participantes en el evento.

La experta del CRU coincidió con otros expositores en el sentido de que el mercado del cobre está en recuperación y proyectó un precio de US$7.000 por tonelada para el presente año.

En relación con la demanda, señaló que la proyección es de 1,1 millón de toneladas más alta para 2025, para aumentar en 2,7 millones de toneladas hacia 2035, crecimiento que sería atribuible a los vehículos eléctricos.

En cuanto a la oferta, sostuvo que se observa una tendencia a la baja, reflejo directo de una menor inversión por parte de las mineras. “Hay muy pocos proyectos de gran escala para el futuro. Las empresas mineras están actuando de manera cautelosa”, dijo.

Davidson aseveró que, en el largo plazo, el potencial de mayor producción se localiza en Chile, con alrededor del 22% de la capacidad hacia 2030. “La industria está enfrentando desafíos de una demanda más fuerte, influida por la tendencia de la electromovilidad, y necesita precios más altos para alentar el desarrollo de nuevos proyectos mineros, pero no tan altos para que gatillen una sustitución”. En ese sentido, advirtió que la industria estaría entrando en un periodo de precios récords, pero con riesgos.

Factores

En tanto, Charlie Durant, Principal Consultant de CRU, comentó que desde el año 2000 que no se registra un crecimiento de la demanda de cobre que no provenga de China, advirtiendo que la menor alza que se presenta por este commodity se explica por factores como el reemplazo.

Sin embargo, advirtió que nuevos sectores, como la electromovilidad, representarán un empuje adicional a la demanda por el metal rojo, la que, según previó, aumentaría un 3,1% en 2018. Destacó que el mundo fuera de China presenta un mayor requerimiento por cobre refinado, compensando de paso el menor dinamismo del gigante asiático en el mediano plazo.

Junto a lo anterior, Durant señaló que la producción de  cobre mina se recuperaría durante 2018, gracias a faenas como Escondida (cuya producción cayó en 2017 por efecto de la huelga), a lo que se sumaría una baja de concentrado en el mediano plazo. En ese contexto, consideró que la oferta no estaría equiparándose a las proyecciones de demanda, sumado a una volatibilidad que continuará debido a la entrada y salida de inversionistas.

Por su parte, Duncan Hobbs, Research Manager de Concord Resources Ltd, expresó que la mayor confianza en que se mantengan precios atractivos en el mercado de los commodities, representa un impulso al ingreso de nuevos proyectos mineros en el corto plazo, lo que impactaría el escenario de oferta de cobre en los años venideros.